viernes, julio 06, 2007

X-Men: Sangre de Apocalipsis

Llegó al fin la última saga de Peter Milligan tras una etapa poco acertada en la segunda serie mutante.

Guión: Peter Milligan
Dibujo: Salvador Larroca
Numeración USA: X-Men #182 - 187.
Numeración Española: X-Men vol 3 #16 - 18.

Que Peter Milligan no se ha lucido en X-Men no es ninguna novedad. La falta total de interés por los personajes y la falta de ideas ha sido patente desde la primera saga, continuando en la misma tónica del denostado Chuck Austen, regalándonos algún momento absolutamente ridículo y personajes que no se comportaban como deberían. Curiosamente, recientemente pudimos leer en Universo Marvel que esta serie era una de las más vendidas en España. ¿Morbo por ver cuán mal lo hacía Milligan? ¿El tirón de Salvador Larroca entre sus compatriotas? ¿De verdad le gustaba esta serie a tanta gente? Esta saga, pese a todo, no es tan mala como las anteriores, aunque tampoco es ninguna maravilla.

En números anteriores hemos ido presenciando el retorno de Apocalipsis, villano fallecido en la saga Los Doce y, luego, supuestamente exterminado en la miniserie "La búsqueda de Cíclope". Como todos los malos (y los buenos si eres un superhéroe Marvel) siempre vuelven, aquí lo tenemos de nuevo entre los vivos, justo en el momento de mayor necesidad para los mutantes tras la diezma. Apocalipsis se proclama como el salvador de la raza mutante y ésta será la idea que Milligan tratará, desacertadamente, de explotar. La idea de Apocalipsis es muy simple y se corresponde con su filosofía darwinista: si la población mutante ha sido reducida a un 10%, hagamos lo mismo con la humanidad y, luego, enfrentemos a los pocos mutantes con los miles de humanos supervivientes para ver quién gana. Para ello, Apocalipsis necesitará a sus 4 Jinetes. Milligan recurre aquí a varios de los subargumentos que se han ido planteando desde el inicio de su etapa para escoger a los nuevos Jinetes. Polaris ha sido uno de los personajes que más uso ha tenido por el guionista y, nuevamente, vuelve a ser usada y manipulada por un villano. Se convertirá en Peste. Gazer fue presentado en esta etapa y su subargumento del torso mutante creo que ha quedado inconcluso. Será Guerra. Fuego Solar será Hambre. No es ningún subargumento de Milligan, sino del final de la serie regular de Pícara que Panini ha decidido no publicar (¿aún?). Y, por último, tenemos a Gambito. Uno de los subargumentos más importantes de Milligan ha sido la relación Gambito/Pícara y la intervención de Mística y Pulso, el nuevo mutante creado por el guionista. Con la conversión de Gambito en Muerte, Milligan decide dar un paro más allá y dar un brusco (y nada necesario) giro a la relación entre la sureña y el cajún.


¿Qué aporta la historia? Pues un par de ideas desaprovechadas y alguna tontería. La primera idea desaprovechada sería el papel mesiánico de Apocalipsis. Milligan lo plantea de una forma un tanto forzada y las reacciones de los 198 y Gambito ante la aparición de la nave de Apocalipsis en los terrenos de la Mansión X (que, por cierto, hay que ver cómo se mantiene en pie tras los ataques de Apocalipsis, los Centinelas, Vulcano, el reverendo Stryker y algunos más) es poco más que ridícula e impulsiva. Sobre todo la de Gambito, que decide convertirse en Jinete de Apocalipsis porque se siente "rechazado" en la Patrulla X (¿?¿?) y, aunque no se fía de Apocalipsis, como Jinete podrá tenerlo más controlado (¿?¿?¿?). La idea de Apocalipsis como nuevo líder mutante podría haber estado mejor planteada, la verdad. Otra idea desaprovechada es la traición de Ozymandias, aunque parece que Claremont le sacará partido en New Excalibur.



También dije que había un par de tonterías. La primera es la incipiente relación entre Pícara y Pulso. Si después de 30 años Pícara decide pasar de Gambito porque puede "tocar" a alguien es que no hemos avanzado mucho. O que Milligan ya no sabía qué más hacer con los personajes, que es lo más probable. Otra tontería: los supercentinelas sacados de Evangelion. Puff, ¿pero qué falta hacían? En el lado positivo, vemos que Kaos y Polaris vuelven a tener una relación más o menos amistosa y que, por fin, dejamos atrás el revival del triángulo amoroso sesentero entre éstos y el Hombre de Hielo que, a estas alturas, ya no venía a cuento.


Una historia con sus puntos fuertes y sus momentos menos afortunados pero que, en general, cumple mejor de lo que, a estas alturas, se podría esperar de Milligan Finalmente, la historia concluye con el retorno del tercer gran villano mutante clásico, Mr Siniestro, como anuncio de la ya tan deseada y esperada etapa de Mike Carey que, esperemos, dará aire fresco a esta serie y, esperemos, nos hará olvidar los últimos 2 ó 3 años de serie. Con él llegará Chris Bachalo, habrá que esperar para comprobar si es el Bachalo comedido de los últimos tiempos o el Bachalo "desencadenado" de obras como Steampunk o New X-Men.

En el apartado gráfico, Salvador Larroca lleva el peso de la trama central. Lleva a cabo una nueva evolución en su estilo y pasa a encargarse no sólo de los lápices, sino también de la tinta y los grises. El resultado es, cuanto menos, llamativo, aunque en esta saga peca de recargar los páginas en algunos momentos. También los diseños de las nuevas armaduras son un poco excesivas, con tanto cuerno, tanta correa y tanta armadura. Las historias de complemento están realizadas por autores efectivos y habituales de trabajos menores en Marvel, como Pasqual Ferry, Aaron Lopresti, Clayton Henry, Paul Pelletier y Casey Jones. Cumplen bien, unos mejor que otros, todo sea dicho.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Ha sido un rollo tal que no he logrado acabarme ninguna de las sagas de Milligan porque me aburría soberanamente.

Tengo fé en Carey y Bachalo (Aunque ya dicen que su etapa no es la octava maravilla, supongo que, al menos, estará contada con más ganas y eso ya es un punto a favor)

A ver si los X Men logran recuperar el buen hacer de antaño.

Unknown dijo...

No toy de acuerdo, IvánN. La verdad es que no he visto mejora en esta última saga, me parece una patochada total. Y Larroca un poco fuera de lugar. Lo de New Universal (o como se llame) tiene buena pinta, pero esto le ha quedado oscuro y, a pesar de todo, bastante vacío.

La etapa de Carey (que ehem me han dejado) no mata, pero le da 100 vueltas a esta patata.

IvánN Díaz dijo...

Yogur: yo también tengo fe en Mike Carey, aunque lo triste es que esta serie lleve casi 3 años sin rumbo y que tengamos que "tener fe" en que alguien vendrá para arreglarla...

Merrick: comparado con lo anterior, esta historia es hasta decente!! :P Y sí, el dibujo de Larroca quedó rarito rarito. Muy "barroco" con tanto detallito.

Estampa de Oaxaca dijo...

Ya la lei, y si creo que es una etapa muy mala, no se como un guionista puede caer tan bajo, digo, si no tiene nada interesante que contar deberia rechazar el trabajo para que su lugar lo ocupe otro guionista emergente que si tenga ganas de hacer algo interesante con los personajes.

Lo peor de este arco es la decisión de Gambito de convertirse en un jinete asi como asi.