Continuamos con los prolegómenos al evento Marvel del 2012 con un voluminoso tomo en el que se recogen los números finales de una serie que, ya desde su punto de partida, no auguraba una larga vida.
Guión: Kieron Gillen y James Asmus.
Dibujo: Salva Espín, Jamie McKelvie, Tim Seeley, Steven Sanders, Billy Tan, Ibraim Roberson, Timothy Green II, Takeshi Miyazawa.
Contiene: Generation Hope #6 - 17 USA (junio 2011 - mayo 2012).
Tomo Panini: 264 páginas. 25€
PREMISA
Desde que Hope llegara a las vidas de la Patrulla X todo ha ido de mal en peor. La aclamada "mesías mutante" ha sido causa de enfrentamientos con muchos enemigos que han acabado con trágicas pérdidas y también ha destacado como una fuente de problemas en la propia Utopía, donde no todos sus habitantes están dispuestos a considerarla como alguien superior a ellos. Desde que comenzase a utilizar sus poderes para salvar la vida de los nuevos mutantes aparecidos tras el Día M, todos con mutaciones potencialmente devastadoras, Hope se ha ido rodeando de un grupo de amigos que, si bien llenan el vacío dejado en la joven por la aparente muerte de Cable, también se han convertido en un objetivo prioritario para Cíclope, que ve en ellos el futuro de la especie mutante, esperanza que parecía haber desaparecido. Sin embargo, el personaje y sus amigos no parecen calar entre el público y la serie regular de Hope y los suyos acabó teniendo un recorrido bastante inusual, como veremos acontinuación.
LA HISTORIA
Este tomo contiene un batiburrillo de historias de diferente calidad. Tras derrotar/salvar la vida a Kenji Uedo en Japón, Hope y los suyos regresan a Utopía, donde Cíclope les informa de que su nueva tutora será Kitty Pryde. Tras el enfrentamiento contra un mutante nonato, el grupo asiste al juicio sobre la custodia de Teon Macik y al suicido de otro joven mutante cuyos poderes resultan demasiado horribles para vivir con ellos. Además, se profundiza en el asesinato de Idie durante Cisma y en las consecuencias que este acto tendrá en la Patrulla X y entre los miembros de la Generación Hope. Por último, Hope y su grupo acuden en ayuda de un mutante que resultará ser un viejo conocido de la Patrulla X cuya presencia no será bienvenida en Utopía. Finalmente, uno de los componentes del grupo les traicionará y, con la amenaza del Fénix planeando sobre sus cabezas, Hope tomará drásticas decisiones.
VALORACIÓN
Cuando una serie que está llamada a contar la historia del personaje más importante del momento en una franquicia cambia de equipo artístico llegado el octavo número, se puede considerar que la serie no ha llegado a los lectores y esto debe ser cierto en el caso de Generación Hope, ya que pronto se situó por debajo de las 20.000 unidades vendidas. El público, obviamente, decide en qué gastarse el dinero, y más en la situación económica que atravesamos, pero las editoriales deben ser conscientes de que no todos los productos tienen la misma viabilidad y no todos los personajes van a vender por mucho que se diga que son importantes. Sin embargo, hay que reconocer que, al menos originalmente, Marvel apostó por esta serie al dar los guiones a Kieron Gillen, quien aportó los mejores momentos al presentarnos a personajes tan poco comunes como Kenji o el feto telépata y al profundizar en la psicología de Idie, Teon y Transónica. La primera saga de este tomo, la del nonato telépata, resulta agradable y entretenida, ya que Gillen retrata a los personajes como verdaderos adolescentes a los que las situaciones les sobrepasan en algunos momentos. Hay que añadir aquí que el trabajo de Salva Espín a los lápices contribuye a dotar de carisma a los personajes.
Sin embargo, coincidiendo con la salida de Espín a la altura del número 8 USA, la serie comienza a verse envuelta en diferentes sagas que cortan casi de raíz los planes que Gillen tuviera preparados y, a pesar de que los capítulos relacionados con Cisma me parecen muy buenos en relación a la trama principal del evento, considero que acusan bastante la falta de frescura anterior. El cambio en los guiones se produce a la altura del número 13 y James Asmus trata de poner toda la carne en el asador al plantear nuevos retos a Hope y los suyos dentro y fuera de Utopía. Me parece que los apenas cinco episodios escritos por Asmus recuperan ese tono jovial que la serie tuvo en sus comienzos y aportan grandes momentos, especialmente en la recuperación de personajes (como Hada, Martha o Sebastian Shaw) y en la interacción entre los mismos, destacando especialmente el rol que acabará adquiriendo Kenji Uedo, a quien Asmus logra pulir mucho para transformarlo en el verdadero villano de la serie. La recuperación de Shaw y su introducción en Utopía está muy bien llevada y continúa en la línea de lo escrito por Gillen y Fraction en Uncanny X-Men. Personalmente, el trabajo de Asmus me parece a la altura de lo escrito inicialmente por Gillen, lo cual me animará a leer la serie regular de Gambito que Asmus escribe actualmente. Sin embargo, creo que tanto Gillen como Asmus fracasan en lograr que los personajes gusten a los lectores, ya que estos nuevos mutantes no tienen ese factor X (ejem) que hace que los lectores empaticemos con ellos, a diferencia de las promociones anteriores del Instituto Xavier.
En lo referente al apartado gráfico, creo que el baile continuo de dibujantes es un evidente síntoma de que la serie no terminaba de cuajar, pero, en general, no hay grandes descalabros, destacando especialmente Ibraim Robertson, Tim Seeley y, como ya he mencionado, Salva Espín. Otra pista más de lo poco viable que pudo haber sido esta serie es el hecho de que la edición española de Panini contenga 11 números en un único tomo, algo bastante inusual en estos tiempos.
5 comentarios:
A mi me gustan Idie (y por lo visto Aaron también le ha visto potencial), Kenji, Martha y Hada por lo que la saga de Asmus me parece lo más interesante del conjunto (junto con la del feto que comentas, vamos, que opino igual que tú).
Con la de jovencitos-x interesantes que se han creado (Alud, camaleón, Arena...) el que se decidan a inventar continuamente nuevos personajes que carecen de la misma frescura es un error. Luego pasa lo que pasa y les cancelan las colecciones, claro.
A mí también me parece que no han sabido llevar bien la serie pero que tenía mucho potencial. Sobre todo al principio, con Gillen, que espero que lo haga igual de bien en Jóvenes Vengadores y se venda bien. Y como son tiempo de integrar mutantes y vengadores, que Gillen incluya en esta serie a esa gran pareja cómica que son Alud y Camaleón para que sea la repanocha
Alud y Camaleón son muy grandes. Me declaro fan total ^__^
Digo yo que, en todo caso, la saga deberia haberse llamado V vs P ¿no? ¿O es que es mas facil darle la vuelta a una A que cambiar la X por una P? :p
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