Tras unos meses en los que la serie regular de Lobezno había caído en la más absoluta intrascendencia, ha comenzado este mes la saga "El viejo Logan", una historia ubicada en un futuro alternativo muy distinto a los que hemos conocido hasta ahora. Como aún es pronto para opinar de la saga, en esta ocasión voy a tratar de plasmar algunas sensaciones que me ha transmitido el primer número de la edición española, que recoge las dos primeras partes de la historia.

En primer lugar, he de decir que
Millar y McNiven cuentan con mi visto bueno. Es decir,
Mark Millar suele pecar de ostentoso y el marketing que le rodea generalmente ensalza demasiado sus obras (como muestra, la
Civil War), pero, a diferencias de otros autores bien publicitados (léase: Bendis o Loeb), suele cumplir con un mínimo de calidad exigible por parte de cualquier lector. Sus historias entretienen, son bastante salvajes y revolucionan a los personajes, aunque sólo sea durante su estancia en las series que escribe. Un claro ejemplo es la etapa anterior de Millar en la serie de Lobezno, en la que mató a Logan, lo resucitó como asesino, hizo alguna que otra escabechina importante y, finalmente, puso a Lobezno en el camino de la redención. Por su parte,
Steve McNiven tampoco me desagrada. Su dibujo es a veces un tanto frío, pero creo que para contar un futuro apocalíptico viene que ni pintado. Además, en estos dos números ya realiza algunas escenas absolutamente brutales que no voy a señalar para no spoilear mucho.

La historia arranca con la sobrecogedora imagen de un Lobezno gravemente herido tambaleándose mientras se abre paso por un bosque. Se nos menciona de pasada la "noche en que cayeron los héroes", un sucesos catastrófico que cambiará al mundo irremediablemente y que marcó a Lobezno hasta el punto de que abandonó la lucha, ni siquiera desenvaina sus garras para defender a su familia. Esta es otra de las novedades, Logan tiene mujer y dos hijos y vive en Sacramento, California, en una granja de cerdos (genial para sus supersentidos...) y no tiene dinero para pagarle el alquiler a sus caseros, que son los nietos de Bruce Banner, tan verdes y malhumorados como su abuelo. El ciego Ojo de Halcón le dará a Logan un plan con el que mejorar su situación económica... un plan que nos llevará a conocer estos nuevos Estados Alterados de Amerika... ¡dominados por los villanos!
A lo largo del primer número, Millar nos va dejando caer una serie de pistas sobre lo que ocurre en los EEUU. Sabemos que los malos están al mando, lo dice la hija de Logan, y sabemos que ya no existen los superhéroes. Sabemos que han pasado unos cincuenta años desde que cayeron los héroes y que los EEUU viven sometidos y en una pobreza total. A pesar del ambiente "western" que se respira, Millar introduce de forma muy adecuada la tecnología, que es equivalente a la actual para evidenciar la crisis de los EEUU. Es una historia llena de guiños a los lectores, como la presencia del Spider-Móvil, la "Caída del Martillo" (ciudad de culto a los héroes mientras se espera que resuciten como hacían antaño), los topoides, los Motoristas Fantasmas y los flashbacks en los que se ve qué le sucedió a Lobezno la noche en que cayeron los héroes. Lo que más me ha llamado la atención es el mapa de los Estados Alterados de Amérika, puesto que hay amplias zonas de los EEUU que no están bajo el control aparente de los cuatro líderes actuales: Hulk, Kingpin (que sustituye a Magneto), Muerte y el Presidente... Además, hay otras ciudades y zonas con nombres de villanos, como Osborn City, El Rey Lagarto en Florida, el Refugio Kree, Electroville, el Cuartel Prohibido Mutante, Hoyo de Clyde, Pym Cross, el Cubil de la Banda de Creel y, la que más me ha llegado al alma, Pote de Pasta Creek. La identidad del nuevo presidente es uno de los enigmas, aunque, basándome en el nombre del país, me declino por Cráneo Rojo. A ver si acierto.

Pese a mi entusiasmo por esta historia, he de confesar que me preocupa mucho que últimamente no haya grandes historias ubicadas en la Tierra 616 (la oficial, vamos) que tengan a Lobezno como protagonista. Logan vuelve a estar sobreexplotado con su presencia en la franquicia X y en la franquicia Vengadora (lo cual le hará participar en prácticamente todos los supereventos de Marvel por partida doble), mientras que su serie regular realmente sobrevive con historias mediocres y que poco aportan al personaje. A ver qué nos depara el futuro de la serie, con ese cambio de protagonismo y la nueva Lobezno: Arma X.